Repercusiones de un dulce y alegre casamiento

El cuestionado arquero del equipo garquense, H.O., avanzó en forma importante en su vida y contrajo matrimonio con la agradable M.I.A. el pasado Sábado 19 de Abril. Sus compañeros del 11G acudieron al importante evento, siendo los primeros en llegar y los últimos en irse.

La ceremonia se realizó en un prolijo salón de fiestas ubicado en plena zona residencial de Carrasco y a la misma concurrieron varios integrantes del 11G, quienes llegaron al lugar más temprano de lo establecido en la invitación, al punto de que ni siquiera el hermano del novio - el también jugador garquense G.O. - había llegado. Esta situación generó cierto malestar en el pre - esposo H.O., quizá por causa de los nervios.

En el lugar estaban importantes figuras del ámbito académico, como el docente de la LICCOM, A.G. y ciertos periodistas como A.F. y "Bebe" M.

Prolijamente vestidos, los integrantes del 11G llegaron poco a poco a lo largo de la noche, varios de ellos acompañados junto con sus respectivas parejas.

El momento que más euforia generó en los jugadores, fue la llegada del capitán G.O. - quien llegó junto con su simpática y siempre presente esposa - y fue recibido con cálidos abrazos por parte de sus compañeros de equipo.

Por otra parte, la llegada del jugador ramplense, P.P., no fue del todo bienvenida por el resto de los integrantes del 11G, al punto de que debió instalarse en una mesa aparte del resto. Sin embargo, sus compañeros de equipo recapacitaron y restablecieron las fraternales relaciones con el mediocampista, invitándolo a compartir la cena y la noche todos juntos.

La novia llegó alrededor de las 21.30 hs - más de una hora después de lo establecido - y la ceremonia comenzó. El único inconveniente fue que la jueza encargada de realizar el casamiento, tuvo serios problemas intestinales minutos antes de llegar al lugar, por lo que fue reemplazada por una chica que trabaja en Servicios y Líneas Hot, quien no tuvo dificultades en realizar su tarea, sin dejar de lado su labor diaria.

Durante la fiesta, el nuevo matrimonio se veía feliz...quizás tanto como cierto lateral del equipo garquense, quien en ningún momento soltó su vaso de whisky y se encargó de dejar su huella en la mente de una indefensa joven presente en el lugar.

Asimismo, otro lateral del equipo, M.B., realizó sus clásicos movimientos de cintura junto con el mediocampista P.D., lo cual causó sensación entre los presentes.

Por otra parte, el zaguero L.M. junto con el mediocampista P.P. demostraron sus dotes bailanteros y pusieron todas sus fichas en una performance inigualable junto con dos agradables mujeres presentes en la pista de baile.

Del mismo modo, las parejas de cada integrante del 11G apoyaron cada iniciativa del grupo y constantemente impulsaron los ya clásicos trencitos fiesteros.

El mediocampista F.G. por momentos sufrió un leve distanciamiento con su compañero P.D. cuando éste advirtió que en el lugar se encontraba su hermano, "Separado al nacer".

La noche se hizo corta y, cuando nadie lo pensaba, eran ya las 4 a.m. Los invitados comenzaron a retirarse mientras en la mesa del 11G sus integrantes permanecían como si nada, amotinados junto con los platos de postre y el champagne.

Llegadas las 4.30 a.m., en el salón ya sonaba música del tipo "hasta la próxima", sólo quedaban pocos familiares y, por supuesto, los integrantes del 11G, quienes a esa altura degustaban el café ofrecido por el servicio de fiestas.

La decisión de retirarse no demoró: los jugadores garquenses tomaron sus abrigos, formaron otro trencito bailantero y comenzaron a retirarse, juntos, sonrientes y contentos, mientras de fondo se escuchaba la melodía "No la dejes ir, no la dejes ir..."